Mil años después me enteré (soy consciente) de que ayer se cumplieron 52 años sin Remedios.
Las obras de Remedios me abrieron las puertas a nuevos, a tener sed de sus obras y saber más de ella, no sabía que mi corazón pudiera emocionarse por los colores y formas que Remedios plasmo.
Alguna vez lo dije, Remedios me inspira, me calma, alegra, anima, incluso me ha hecho imaginar muchas historias con tan solo ver una pintura suya, y me hace vibrar con cada una de sus obras (algunas más que otras, claro).
Gracias por alejarme de la realidad...