Rupi Kaur

"Y aquí estás a pesar de todo"

El miércoles fue el último taller de HSE con el tema de empoderamiento, la verdad es que no fue lo que yo esperaba...o no sé, toda la semana no estuve segura si de verdad las cosas parecían pesadas de llevar y triste o fue simplemente porque mi ánimo no estuvo al 100%. 

Bueno, mucho bla bla, termine reflexionando un poco y cuando pensé que iba a salir sin algún sentimiento "profundo", Lucía nos empieza a leer poemas de Rupi Kaur (una poeta, escritora e ilustradora canadiense feminista, según wikipedia) y termine viniendome un poco abajo al pensar en todo lo que ha pasado este tiempo y de cómo era antes y como soy ahora. 

El golpe final fue cuando escuché el poema que puse en un post antes de esté y bueno, no quiero explicar el porqué y no creo que interese mucho el tema. 

Lo importante es que como ya dije, sirvió para hacer una retrospectiva de cómo era antes de entrar a Laboratoria y cuánto he crecido, recordé todo lo que ha pasado y lo que he hecho para estar en donde estoy ahora. 

En fin, no quiero dormirl@s, jajaja o ¿si lo logré?

Le dejo una recopilación de 25 poemas traducidos de Rupi esperando que le guste tanto como a mi...enlace 

"Todas avanzamos cuando reconocemos lo resistentes y sorprendentes que son las mujeres que nos rodean"

Suficiente

"Si estás herida y te han abandonado no te preguntes si eres suficiente, el problema es que eres tan suficiente que no fueron capaces de llevarlo"

Rupi Kaur

Fumar

El día que aprendí a fumar era lunes, empezaba la semana y un vicio que dudo mucho se acabe de una buena manera. El día que aprendí a fumar llovía como todo dentro de mi.
Aprendí a fumar por seguir tus pasos, al final te fuiste y sólo me quedó la nicotina y tu recuerdo como vicio.
El día que aprendí a fumar tuve miedo de que me descubrieran en casa, ahora tengo miedo de dejarlo porque es como si un hilo de humo me uniera a ti y cada bocanada me hiciera sanar llenando de humo mi corazón.

El día que aprendí a fumar casi me ahogo, hoy día con cada inhalada siento que puedo respirar mejor. El día que aprendí a fumar me sentí poderosa, hoy si no lo hago me siento débil. El cigarro se volvió una extensión de mi brazo, un adorno entre mis dedos.
Quisiera ser el pitillo que está entre tus dedos después de estar presa entre tus labios y escribir algo más interesante que estas palabras ridículas.
La primera vez que fume supe que tu serías un vicio más poderoso que cualquier cigarro, sabía de más que yo para ti sería una chica desechable. Las cajetillas se consumieron para afirmar mis sospechas hasta llegar al final de todo esto, sin embargo no puedo evitar envidiar a aquel cigarrillo para estar contigo una vez más, para seguirte causando adicción para que no te vayas...