Después de 4 meses, llegamos al día en que era nuestro turno. Sin reglas, solo nos dieron consejos para guiarnos un poco y una fecha con su hora para mostrarlo a todas las demás, es decir, tuvimos la libertad para expresar lo que somos (o pretendemos ser) y con la responsabilidad de manejar nuestro tiempo como más nos conviniera.
Pareciera que fue una semana relajada, han pasado 7 días y así lo parecen pero haciendo memoria, no todo fue color de rosa. Obvio todas estábamos súper emocionadas porque hacíamos lo que queríamos con la confianza que teníamos con nuestro primer squad. En mi caso, me abrumé un poco porque no tenía ni la más remota idea de que es lo que iba a hacer. Me encontré con un montón de ideas que sentía que me aplastaban y lo peor, es que no podía plasmar alguna sólidamente.
Mil horas después, poco a poco se fue dibujando una sencilla landing page que a pesar de estar en papel, sentí que me reflejaba (aunque sea un poquito). Luego, no sabía ni como o por donde empezar, jaja, ahora que lo pienso creo que estuve tan emocionada que me bloqueaba. Para las 11pm del martes yo tenía la cabecera con mi nav, una imagen y un color con su fuente definida...aunque había algo que no cuadraba.
El miércoles temprano cuando lo volví a ver, me asquee de lo poco que había hecho y en un ataque, borré lo poco que había hecho porque considere que el color no me reflejaba a mi misma, ajá, volví a cero por una locura. No entré en pánico porque me dije que seguramente saldría mejor y que aún tenía mucho tiempo antes del viernes a las 4pm...5 min después hice una cara graciosa de susto,
después quería que existiera ctrl-z para deshacer la tontería que había hecho. Me quería matar por ser tan loca-tonta, jajaja. Fue en la tarde entre risas que Nely (te adoro) me encontró un tema y el color que se ajustaba perfectamente a mi y con eso, por fin pude trabajar más o menos a gusto.
Digo más o menos porque me encontré con el problema más grande de todos: Estar segura de conocerme quien soy y qué es lo que quiero llegar a ser.
El jueves de regreso a casa encontré la inspiración de definir perfectamente como es que quería que se viera mi portafolio. Desconozco si iba hablando sola o que es lo que pasaba porque la gente se me quedaba viendo un poco raro.
La verdad es que no quedé para nada contenta con el resultado que obtuve al final. El viernes por la mañana tenía ganas de decirle a Lucille y a toda Laboratoria que mi portafolio se lo había comido mi perro, no quería mostrarlo porque seguramente sería el peor de todos hasta que Griss (la sabia Griss) vio nuestra cara de angustia y nos iluminó con lindas palabras ciertas, como que hace 4 meses no hubiéramos logrado nada de lo que ahora sabemos y que veamos de lo que somos capaces hoy día. Como sea, esas palabras me calmaron un poco hice unos pequeños ajustes por aquí y por allá y llego la hora de la verdad.
4:15 pm (más o menos) y la primera valiente en pasar fue Macky y de ahí en orden alfabético por nombre, yo fui de las últimas. Medio tuve una ligera temblorina por tantos nervios y emoción, hice rápido mi sufrimiento y ahora sé que está bien no estar contenta con lo que logré ese día, pero como siempre TODO se puede mejorar y eso es lo que haré.
¿Quiere juzgar? https://silviaguerra.github.io/
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